El presidente Alberto Fernández defendió este miércoles la decisión de suspender temporalmente por 15 días las clases presenciales para contener la segunda ola de coronavirus en el Área Metropolitana de Buenos Aires (AMBA).
"Yo mismo tuve discusiones dentro de mi mismo equipo. Mi ministro de Educación (Nicolás Trotta) insistía con las clases presenciales", admitió el mandatario esta mañana en diálogo con radio Diez, al referirse a la gestación de la restricción más sorpresiva dentro del paquete de anuncios.
"Pero las clases presenciales no son solo las clases presenciales: hay que ir a un colegio primario y ver el horario de salida de los chicos, ver cómo las madres se agolpan frente a la puerta, ver cómo de ese modo el contagio puede hacerse más fácil, ver cómo los chicos juegan entre sí cambiándose los barbijos, ver lo difícil que es”, agregó el primer mandatario.
En el mismo sentido, el jefe de Estado añadió que "hay que ver lo difícil que es porque todo este tiempo yo escucho a todos: he hablado con maestras de chicos con capacidades diferentes y lo difícil que es trabajar con esos chicos que no entienden el problema sanitario que enfrentan".