Desde el año 2006 la Municipalidad de San Rafael viene desarrollando exitosamente el Programa ACELSUR, a través del Área de Desarrollo Social. Esta nueva Ordenanza amplia el alcance y funciones del programa.
“La intención fue actualizar el programa que se viene realizando hace más de 15 años en nuestro municipio y fue trabajado en conjunto con la directora del Área de Desarrollo Social Mariela Langa y la licenciada Victoria Rodríguez de Mesa quienes llevan adelante el mismo”. Explico Barcudi.
Con respecto al programa el Concejal Samuel Barcudi, quien fue autor de la Ordenanza, nos explica que: “Si bien desde el Municipio se viene trabajando desde el año 2006 en esta temática, lo que buscamos con esta nueva Ordenanza es ampliar el alcance, es decir, ser un Municipio más presente, creemos fundamental facilitar y garantizar el acceso a productos aptos para celiacos en los establecimientos comerciales que se encuentren dentro del Municipio de San Rafael, más aún cuando nuestro municipio constituye un sitio turístico por excelencia, donde concurren cientos de miles de personas de diferentes partes del país y del mundo, a los cuales corresponde también brindar una respuesta adecuada y acorde a las normativas nacionales e internacionales”, manifestó.
Dentro de las novedades que se incorporan con esta Ordenanza se establece que los bares, restaurantes, casas de comidas y todo otro establecimiento donde se produzcan y/o comercialicen alimentos, deberán adecuarse a esta normativa dentro de los próximos tres (3) años y desarrollar un menú libre de gluten.
Además, tendrán que ofrecer al público una carta con el menú que permita identificar de forma clara las preparaciones libres de gluten. “Lo que se busca entre otras cosas es además del gran trabajo que se viene haciendo incorporar funciones y tareas, garantizar módulos alimentarios para la distribución a personas celíacas de escasos recursos, brindar capacitaciones sobre la manipulación de alimentos y elaboración de comidas, no solo para los familiares del paciente, sino para la comunidad en general, habilitar e inspeccionar los locales donde se comercialicen alimentos aptos para el consumo de pacientes celíacos, entre otras cosas”. explicó Barcudi.
Los productos aptos para celíacos, además de tener un precio más elevado que los alimentos convencionales, muchas veces son difíciles de conseguir, lo cual obviamente dificulta el correcto tratamiento de la enfermedad, por ello se vuelve necesario estimular la integración social de las personas que padecen de celiaquía, ampliando sus posibilidades de acceder a los alimentos y además supervisar los procesos de elaboración y comercialización de los mismos para garantizar que lleguen en condiciones de consumo.
