La Catedral San Rafael Arcángel fue sede del tedeum por el 208º Aniversario de la Declaración de la Independencia. La celebración fue oficiada por el obispo diocesano Carlos María Domínguez y presenciada por el intendente Omar Félix y la vicegobernadora Hebe Casado.
Durante su alocución, monseñor Domínguez manifestó que: “la Independencia es una tarea cotidiana que nos compromete a todos, superar las esclavitudes personales y sociales para vivir en libertad. Y la libertad no es pretexto para que no haga lo que quiera. El libertinaje hace daño a la sociedad”.
“En un país donde más de la mitad de las personas viven en la pobreza y hay cada vez más desigualdad, muchos entran en la disyuntiva de comer o comprar medicamentos y tantos otros sufren la precariedad en sus puestos de trabajo, Independencia se vuelve una palabra vacía de contenido”, expresó.
Luego el obispo afirmó que: “la primacía de los números es algo que nos esclaviza. Las personas no se pueden numerar, obsesionarse con que los números cierren nos puede hacer olvidar que detrás de los porcentajes hay hermanos que están sufriendo”.
“Solo la verdad nos hará libres. Y la verdad no nace con nosotros, nos precede. Por encima del poder del hombre está la verdad, debe ser el límite de todo poder”, sostuvo Domínguez.
Por último, el referente de la Iglesia Católica en el Sur de Mendoza, consideró que: “la confrontación no nos hará independientes, mucho menos una mirada sesgada por la ideología. Solo la verdad nos hará libres, buscándola juntos, defendiéndola entre todos para construir una civilización del amor en la que todos seamos protagonistas”.
OMAR FÉLIX: “SE LE DA UN USO INTERESADO AL CONCEPTO DE LIBERTAD”
El intendente Omar Félix brindó su mensaje en el marco del Día de la Independencia y bregó porque “que sea un día de reflexión, amparándonos en los conceptos de Independencia y Libertad: ambos tienen que ver con el amor a la Nación, con el sentimiento de un pueblo libre”.
En consonancia con el obispo Domínguez, afirmó que: “la libertad no es libertinaje, sino la posibilidad de poder construir solidariamente un país mejor a través de la grandeza de su pueblo”.
Respecto al tedeum, resaltó el mensaje del monseñor y consideró que: “a la libertad se le da un uso interesado, vinculado a un dogma para justificar acciones políticas que generan más marginados, más pobres”.
En virtud de lo anterior sostuvo que: “todos los actores de la sociedad tienen que tomar las palabras del obispo, para entender que no se trata de tomar posiciones extremas, sino de hacer lo que hay que hacer en cada momento en función de los intereses de la patria, el interés común y el general, y así contribuir con el bienestar de los que menos tienen".
“El Estado debe estar donde no está el privado. Si dejamos todo librado a la acción del Dios mercado, terminan las corporaciones manejando la economía. Y en ese sentido la economía no es libre: o la manejan las corporaciones o el Estado pone el equilibrio para que llegue a todos los sectores”, enfatizó.