Ayer en horas de la tarde trasladaron al Cementerio Central las cenizas del artista plástico Antonio Bermúdez Franco y las de su esposa Josefina Butti.
Recordamos que Bermúdez comenzó a trabajar a los 14 años con un álbum de caricaturas, luego realizó una exposición en Río de Janeiro, colaboró en la revista Atlántida y participó en el primer Salón de Humoristas realizado en Buenos Aires. También viajó a Europa con caricaturas de políticos y escritores argentinos y se nutrió de la cultura europea.
Luego formó su familia con la hijo de Servando Butti, reconocido pionero de San Rafael; y pintó, escribió y enseñó en los colegios locales Normal y Nacional.
Hoy sus obras descansan en el Museo Omar Reina, en la escuela Normal, en Casa Burgos.